Los Clerigos no
puedẽ
pueden
, ni
debẽ
deben
entender en
semejātes
semejantes
negociaciodes
negociaciones
, i assi por el consiguierte, tan
poco gozaràn de sus privilegios,
por estar les prohibida esta
ocupaciō
ocupacion
por todo derecho.
I aludiendo à esto dize S. Ambrosio,
D. Ambros.
1. offic. c. 36.
q̃
que
si
aun las leyes humanas prohiben a
los soldados,
q̃
que
se
ocupẽ
ocupen
en ellas,
quāto
quanto
mas se deben abstener de todo su uso i ocupacion, los
q̃
que
exercen la milicia divina, i
hā
han
de vacar
à solos sus ministerios? I Sidonio
Apolinar
en una de sus epistolas,
queriendo mostrar,
quā
quan
relaxadas
estaban las costumbres del
mũdo
mundo
en su tiempo, no hallò mayores encarecimientos con que expressarlo, que dezir, que velaban los ladrones, dormian las Potestades,
logreaban, i mercadeaban los Clerigos, i cantaban las horas divinas
los Syros (
q̃
que
eran muy avarientos
i negociosos) militaban los negociadores, i los soldados
negociabā
negociaban
, jugaban à la pelota los viejos,
i à los dados los moços, i se ocupaban los Eunuchos en las armas,
i en los estudios los soldados de
guarnicion, que eran entonces Godos, como lo explica alli
Savatō
Savaton
.