Entre las provincias que mas
abundantes son de sal, i salinas de
todos generos, ponen los Autores referidos, i otros,
las de nuestra España, que la quiso Dios privilegiar en la copia de este, como
de otros metales. I que assi suple
el defeto que della tienen otros
Reinos estraños,
q̃
que
se la sacan, i
cō
sumen
consumen
à precios crecidos. I despues, con la accession de las Indias, podemos dezir, que puso el
mesmo Señor todos los alfolies
dela sal en sus manos, pues no se ha
descubierto Isla, ni region dellas,
donde no se hallen muchos poços
de sal marino, i muchos mas montes del metalico, que qualquiera
dellos basta para la provision de
ambos mundos.