Por lo qual la Magestad del Rey don Felipe IV. nuestro Se ñor (que Dios guarde) advirtiò por un prudente Decreto à su Real, i Supremo Consejo de las Indias, que antes de embiar visitas generales à las Audiencias, tẽ tasse tentasse otros remedios, i viesse si bastaria, que el Oidor ò Ministro, que huviesse estado muchos años en alguna provincia, donde ya fuesse odioso, ò tedioso, ò por otras causas se sintiesse mal de su proceder, fuesse mudado à otra Audiẽcia Audiencia . Cō siderādo Considerando que pendientes estas syndicaciones, i visitaciones, los Magistrados se acobardan, i los provinciales, i populares menosprecian à los que deben respetar, i obedecer, i por el consiguiente no se administra la justicia con la libertad, i entereza conveniente, como lo advierten Paris de Puteo, i Simancas,
i se lo oi dezir al Marques de Montesclaros Virrey del Perù que comparaba estas visitas à los torvellinos, que suele aver en plaças i calles, que no sirven sino de levantar el polvo, i paja, i otras horruras, de ellas, i hazer que se suban, à las cabeças.
Loading...