I verdaderamente pudo parecer cosa dura, i odiosa privar à los
compradores, i posseedores de estos oficios de la gracia, i facultad
de poderlos passar, i renunciar en
sus hijos, aunque fuessen menores
de edad, i andar buscando cabeças
de hombres estraños en quien ponerlos, siendo assi, que para los hijos son vistos todos querer adquirir, i reservar quanto ganan por
sus contratos.