En ultimo lugar, amonesto à los
Obispos, lo
q̃
que
debiera aver dicho
en primero, que es,
q̃
que
con gran cuidado velen, i
mirẽ
miren
por sus ovejas,
i mas los de las Indias, que tienen
tanto que hazer en la
predicaciō
predicacion
,
conversion, i buena enseñança de
sus naturales, que parece hablò dellos S. Iuan Chrisostomo,
quando dixo, que convenia, que los Obispos cada dia barbechassen lo duro, i denso de su rudeza, para que
prenda, i arraigue en ellos la semilla, que se les echare, de la palabra
de Dios.