I ciñendo en breve, lo que latissimamente està escrito por varios
Dotores en esta materia,
digo,
que si al inferior le constasse con
evidencia, que la assercion del superior en que fundò su mandato es
siniestra, i por el consiguiente injusto lo que se les
māda
manda
executar,
no solo puede, sino debe sobreseer
en la execucion, hasta avisar le delo que passa, para que mejor informado provea lo que convenga.
Porque à los Principes nunca se
les ha de obedecer en lo ilicito, ni
ellos con toda la plenitud de su potestad pueden mandar que se estè à
sola su assercion en perjuizio de
tercero.