I Beluga añade, que esto, todo
el mundo lo tiene por Evangelio.
I todos, que quando el Principe
haze algo en contrario de ello, se
presume ser engañado, porque no
ay cosa que mas desdiga de su
grā
deza
grandeza
, i autoridad, que revocar lo
ya concedido, ò faltar à la
constā
cia
constancia
i estabilidad de sus dadivas ò
promessas, pues antes debe
aumẽ
tar
aumentar
semejantes mercedes, que quitarlas, ò minorarlas.