I
en primer lugar, en favor del
marido, se puede alegar i ponderar la naturaleza de los que
llamā
llaman
correlativos, quales entre si lo son
Marido, i Muger, que suele siempre ser tal, que lo dispuesto en uno, se tiene por dispuesto en otro, i
se juzgan por igual, i especificado
el uno, se tiene tambien el otro
por expressado.