I de aqui es, que nunca han de
temer sus Ministros caer en su indignacion, si constandoles de ellos
replicaren à sus mandatos, i con el
respeto debido les representaren,
i consultaren las justas causas que
han tenido para obedecerlos, i no
cumplirlos; porque antes pueden
i deben esperar,
q̃
que
esto les serà grato, pues es lo mesmo
q̃
que
ellos les
tienẽ
tienen
encargado en los textos ya referidos,
los quales ilustran en esta
parte varios Autores,
disputando, como, i quantas vezes se podran hazer estas replicas, i consultas, i en particular Cepola, i Zabarela,
que notan de tristes, cobardes, i miserables à los Prelados, que no se atrevan à replicar,
ni abrir la boca contra los mandatos Apostolicos, aunque sientan
q̃
que
pueden ser dañosos, ò injustos, con
que dan ocasion à que se hable mal
de ellos, i se diga
dōde
donde
està el Dios
de los Clerigos.