A que añado los de Herodoto,
i Lactancio Firmiano,
que reconocen, que desde el principio del
mundo, todos los que se ocuparon
en sus conquistas, ò poblaciones,
llevaron la mira à las mesmas riquezas, i comodidades; i la
esperā
ça
esperança
de conseguirlas, hazia
q̃
que
aventurassen con gusto las vidas. Razones,
cō
con
las quales, i otras no menos
fuertes, satisfacen à esta calumnia
Autores muy graves.