La India,
ſsignificando la Provincia de Nueva E
ſs
paña, en
ſsu cabeça Mexico, no e
ſstà
ſsin mi
ſsterios en
la pintura, ni
ſsin antiguedades, en la hi
ſstoria: coronada de plumas, hermo
ſsa gala de aquellas gentes,
cuya antigua riqueza con
ſsi
ſstio tanto en la plumeria,
como
ſse vio en los inmen
ſsos camarines del Rey
Motezuma, de cuyo de
ſspojo embiò don Fernando
Cortès curio
ſsas obras al glorio
ſso Monarca Carlos
Quinto, que admirò por lo nuevo, ver que la pluma
ſsuplie
ſs
ſse en la pintura tan vivamente la falta de los
pinzeles. Tiene en la mano un ramo, cuyas flores
ſsu
ſstentan al mi
ſsterio
ſso paxarillo, que llaman
Huitzitzilin; en cuya pequeñez
ſse bu
ſsca la mas precio
ſsa
pluma, para formar imagenes de
ſsus vi
ſsos i colores.
E
ſsta avecilla, como e
ſscrive Fr. Iuan de Torquemada, en llegando el mes, en que el invierno comiença
à ago
ſstar los campos de Nueva E
ſspaña, i a de
ſspojarlos de las flores, cuya belleza es tan breve, bu
ſscando |
e
ſscondido lugar en las e
ſspe
ſsuras de los arboles, a
ſssido de un ramillo, como
ſsi fuera hoja del,
ſse queda
ſsu
ſs
pendido, i al parecer muerto, i
ſsin actos vitales, ha
ſsta
la primavera, que con las primeras aguas le recuerdan los truenos, de
ſspertandole del
ſsueño mi
ſsterio
ſso,
con e
ſspereços i
ſseñales de aver dormido, bolando à
bu
ſscar las flores, que ya dan a los prados vi
ſsto
ſsa librea,
ſsin empeño co
ſsto
ſso, añadiendo
ſse de
ſspues, i
ſsacando
ſsus melindro
ſsos polluelos, que
ſse crian atomos de pluma, i buelan ramilleres de colores. No
bu
ſsque el curio
ſso mejor
ſsimbolo de la re
ſsurreccion,
que e
ſsta avecilla puede igualar la pompa de la Fenix, i
ſser
ſsingular en la advertencia del mi
ſsterio. El
paxaro, que e
ſstâ al lado de la hermo
ſsa Mexicana, es
el que fingieron
ſsus hi
ſstorias (con
ſservadas en los
cantares i mu
ſsicas) que avia movido, de
ſsde la Provincia de Aztlan, las quatro familias Mexicana, Llacochalca, Chalmeca, i Calpilco: porque dizen, que
oyendo cantar e
ſsta ave; i pareciendo, que dezia,
Tihuì
, que
ſsignifica,
Ya vamos, uno de
ſsus Sabios, cuyo nombre era Huitziton, reparando en el canto,
fundô la invencion, i comunicando la
cõ
con
Tecpatzin,
hizieron que creye
ſs
ſse el pueblo, llamarlos aquel paxaro à bu
ſscar una ventura grande; moviendo
ſse todos à
ſseguirla, con pone
ſsre en camino: i llegando al
lugar Hucyculhuacan,
ſse les aparecio el Demonio
en forma de un idolo, diziendo, que era Huitzilopuchtli, que quiere dezir, Dios de las batallas; haziendo
ſse llevar en un
ſsitial con el acto tan celebrado, â que pu
ſsieron por nombre
Teoma ma, i mandando, que
ſse queda
ſs
ſsen las demas familias, e
ſscogiendo la Mexicana, i poniendole una
ſseñal a cada
uno della en el ro
ſstro, dandoles arco i flechas, i el
Chitatli, que es una red en
q̃
que
hechan xicaras, como |
la, que el paxaro tiene en el pico, los guiò a Mexico:
con tantos remedos: del viaje de los I
ſsraelitas,
ſsaliendo de Egipto, que parece afectò el Demonio, con
mentiro
ſsa idolatria, repre
ſsentar
ſsombras de aquellos
ſsuce
ſs
ſsos. E
ſstos fundaron à Mexico, juntando
ſse
en un lugar llamado Temaycaltitlan, en medio de
la laguna, i decretando, que dos de
ſsu familia, que
fueron Axolohua, i Cuauhcoatl, eligie
ſs
ſsen
ſsitio entre aquellos Iuncales i carrizos para la fundacion,
ſsenalandole, adonde dizen fabulo
ſsamente, que
ſse
les mo
ſstrò una peña, con un Tunal nacido en ella,
ſsobre el qual e
ſstava una Aguila, rodeado todo de azules aguas,
ſsiendo e
ſste el
Tenuchtli, que agora tienen
por armas, como
ſse vèn en el e
ſscudo, que advierte
e
ſsta hi
ſstoria. Tanto importa
ſsaber las de las India
ſs,
aun para entender la e
ſstampa de un libro: fiado à
docto Mecenas à quien
ſse dedica, cuyos e
ſscudos de
armas a
ſs
ſseguran proteccion al que le e
ſscrivio concertadas noticias, bu
ſscadas en la multitud de Autores, que ha leìdo, como lo dize
ſsu Biblioteca, impre
ſs
ſsa, con a
ſs
ſsombro de los mas leidos, i e
ſstimacion
de los mas curio
ſsos: adquiridas en diez i ocho años
de Indias, adonde en los cargos que tuvo, i en los
e
ſstudios que trabajò, mo
ſstrò con evidencia, que
no avia hecho tan largos viages para quedar rico,
ſsino para
ſser
ſsabio; que como dixo el Autor de los
Proverbios en el capit. 11.
Beatus homo, qui invenit
ſsapientiam, & qui afficit prudentia, melior eſst acquiſsitio
eius, negotiatione auri & argenti.
Buelvan los mas de
las Indias cargados de oro i plata,
q̃
que
no vino pobre el
q̃
que
llegô a
ſsu patria docto;
porq̃
porque
parezca co
ſsa de otro
ſsiglo (como dixo S. Bernardo en el lib. 4. de
cõ
ſiderat
considerat
.)
venir uno de la tierra del oro
ſsin traerle, i pa
ſs
ſsar por
el cerro de la plata
ſsin bu
ſscar la:
Nõ
Non
ne alterius ſs
æculi |
res eſst, redÿſs
ſse legatum de terra auri ſsine auro? tranſsiſs
ſse
per terram argenti,
&
argentum neſsciſs
ſse?
E
ſsta hazaña ya
comiença à ver
ſse premiada; i de
ſsempeñandome de
lo que dixe en la Biblioteca del Autor, de que no conocia mayor
ſsujeto en materias de Indias, lo mue
ſs
tra tanto en e
ſsta, que admiraràn los de aquellos
Reynos ver, que aya en e
ſstos, quien enterado di
ſs
curra en todo, con tan cierta noticia, que los mi
ſsmos
naturales de las Provincias con hablar de todas, no
pudierã
pudieran
alcançar de
ſsus tierras propias lo
q̃
que
hallarân
en e
ſste Tratado:
q̃
que
da fianças de muchas obras,
q̃
que
eſtã
estan
e
ſscritas, para
ſsalir a luz;
tã
tan
ſsingulares en los a
ſs
ſsumptos, como doctas en los e
ſstudios; que re
ſspetando la
mayor de la Recopilacion, e
ſsperan de
ſsocupada
pluma enriquezer; el govierno e
ſspiritual de Indias,
con el Bulario; las hazañas de Chile, con
ſsu hi
ſstoria;
las antiguedades de Lima, con
ſsus grandezas; el Ofir
de Ga
ſspar Barrero, con traduccion i notas; el Cerro
de Poto
ſsi, con
ſsu de
ſscubrimiento i grandezas; las Indias todas, con la nobleza dellas; las co
ſstas de aquel
mundo nuevo, con la Iberica expugnada; el Real
Con
ſsejo de las Indias, con
ſsu fundacion. Muchas vigilias
ſsuponen e
ſstos trabajos, no
ſsiendo
ſsu menos e
ſs
timable calidad el
ſser univer
ſsales, para todas aquellas Provincias, como lo es el Autor para cada una.
Yo no los alabo por lo que me tocan; i porque, como
dixo
ſsan Enodio en la 10. epi
ſstola de
ſsu lib. 1. Temo
ne
amor currat in vitium.
E
ſspero, que e
ſste libro oca
ſsionarà el de
ſsear los otros; i que el tiempo llegarâ
à laurear con fama, à quien e
ſscrive
con humildad.