I singularmente Mateo Tympo
en su Espejo de Principes,
dō
de
donde
pone entre las primeras señales del que es, ò quiere ser bueno,
que huya la avaricia, i exerça la
gracia, i liberalidad, que es el firmamento de todos los Reinos, i
que quien los quisiere sustentar, i
administrar bien, lo ha de hazer
con hierro, i con oro, usando de
aquel contra sus enemigos, i de este, para remunerar à los
q̃
que
le sirven
con amor, observancia, i fidelidad.