Gonçalo Hernandez de Oviedo,
contesta
tābien
tambien
en todo lo referido, i dèl lo tomò Antonio de
Herrera. I luego haze capitulo
particular muy digno de leerse, de
la
creaciō
creacion
, i
duraciō
duracion
de las perlas,
i
q̃
que
se envegecen, i por esso pierden
de su valor. I de las muchas, i muy
grandes
q̃
que
se
hallarō
hallaron
en el mar del
Sur àzia el Darien, en la isla de
Terarequi, i en otras partes, por
el año de 1515. una de las quales
fue de peso de 31. quilates, de hechura de pera, de lindo color, i
muy oriental, i la
cōprò
comprò
la Emperatriz à doña Isabel de Bobadilla,
muger
q̃
que
fue de Pedrarias,
q̃
que
es la
q̃
que
entonces, i despues acà han llamado la Peregrina. I que èl tuvo
otra
redōda
redonda
, de peso de 26, quilates, i otra de talle de pera,
q̃
que
huvo
en Panama el año de 1529.
q̃
que
la
vendio en 450. castellanos. I à estas perlas alude Pedro Martir en
su suma
quādo
quando
dize,
q̃
que
vio vender
una en 1200. escudos, i
Simō
Simon
Mayolo,
q̃
que
refiriendo à Oviedo, dize,
q̃
que
se sacaban tan
grādes
grandes
como huebos de gallina. Con que no tienen
nuestras Indias
q̃
que
embidiar, ni admitar las Perlas de Cleopatra, de
q̃
que
hazen
tāta
tanta
mencion, i
estimaciō
estimacion
Plinio, Macrobio, i otros Autores,
diziendo aver valido cada
una cien mil ducados.