La sexta advertencia sea,
que si entre los compañeros, i colegas de una Audiencia, ò Consejo, que tienen igual autoridad,
i potestad, es tan dañoso el mostrar aficion particular à sus votos i pareceres, i gusto de que los
sigan, i el enojarse con ellos sino
lo hazen, ò intimidarlos para
que lo hagan, bastantemente se
dexa entender, quanto mas da
ñoso serà en los que en los mesmos Consejos, ò Audiencias, no
entran como iguales, sino como
superiores, quales son los Virreyes, i Presidentes dellas, que tienen, i hazen el oficio de sus cabeças. Pues quanto mayor es su
mano, i poder, podràn tambien da
ñar mas, sino dexan votar con entera libertad à sus Senadores, ò
descubren, quando lo comiençan
à hazer, aunque sea con solo
el semblante, ò otros leves indicios, lo que ellos tienen en voluntad.