I verdaderamente, supuesto
q̃
que
este cuidado siempre es muy ordinario en todos los Patronazgos
Reales, como lo advierten Cabedo, Bernartio, i otros que de ellos
escriben,
con muy justa causa debe ser mayor en el de las Indias,
donde nuestros Catolicos Reyes
por la gran distancia que ay desde
ellas à Roma, por concession de
la
Sāta
Santa
Sede
q̃
que
en ella reside, ò por
dezir mejor perjussion, i comission suya, tienen en sus ombros todo el peso de su govierno, i predicacion, i de la conversion de los
Indios, como consta de las palabras de la primera Bula de Alexandro VI. que dexo insertas en
el capitulo 10. del libro primero,
donde les concede i encarga la
Cō
quista
Conquista
, con este cargo de
cōvertir
convertir
,
i instruir los infieles, i embiarles i
sustentarles personas de aprobadas
costũbres
costumbres
, temerosas de Dios,
doctas, peritas, i expertas en este
ministerio, i hazer todas las demas cosas convenientes à introducir i entablar la Fè Catolica, i Religion Christiana en aquellas provincias, como se esperaba de su
gran devocion, i Real magnanimidad.