Esto se fue observando assi muchos años, hasta que cayendo en
quiebra las consignaciones, i no alcançando los reditos de ellas à pagar por entero à los que servian
estas plaças, los Virreyes, como si
fuera cosa de mera gracia, mandaban pagar à los que les parecia, dexando à los otros sin blanca, i obligados à mendigar. I como llegassen sus quexas à los oidos Reales, i juntamente sintiessen, i escribiessen muchos, que era inutil
la conservacion de estas compa
ñias, i que lo que en sus pagas se
consumia, seria mejor convertirlo
en otras cosas del Real servicio, se
despachò cedula, dirigida al Virrey Marques de Montesclaros, en
dos de Março del año de 1614. para que informasse de lo que cerca
de esto le parecia, i fuesse
disponiẽ
do
disponiendo
el hazer la dicha reformacion,
por el modo que mas conveniente
le pareciesse. Lo qual no executò,
antes representò razones, que tuvo por eficazes, para persuadir,
q̃
que
no convenia hazerla, i que las
cō
pañias
compañias
se fuessen entreteniendo, como se estaban.