Al qual añado, que supuesto,
que como queda dicho, hazen con
estos un cuerpo, i un Reino, i son
vassallos de un mesmo Rey, no se
les puede hazer mayor agravio,
que intentar excluirles de estos
honores, segun la dotrina del Filosofo,
con quien contesta Pedro
Gregorio,
advirtiendo, muy en
nuestros terminos, que suele ser
ordinario imputar temerariamente vicios à algunas Naciones, por
odio, ô embidia de los que los escriben, i siembran, ò por otros
respetos, i que assi no se les debe
dar credito, ni por uno, que prueben aver sido malo, condenarlos à
todos; pues como latamente prue
ban Cassaneo, i Textor,
no ay
nacion alguna à quien se ayan dexado de imputar, i oponer algunos
vicios, i defetos.