Mas bolviendo aora à nuestro
proposito, si se diesse caso (como
se puede dar, porque se trata de
ello) que el Arçobispado de Lima,
por la distancia de los lugares, ò
por otra justa causa, se dividiesse en
otros Obispados, entonces la
costũbre
costumbre
introducida, i obtenida por
el de Lima, aprovecharia à los Obispados, que dèl se desmembrassen. Como por el contrario vimos,
i praticamos en el Obispado del
Cuzco, que la sentencia que contra èl obtuvieron los Indios en el
pleito que se ha referido, prejudicò despues igualmente à los nuevos Obispados de Guamanga, i
Arequipa, en la parte que dèl se
les aplicò, como lo nota bien el Dotor Carrasco.