De la mesma prohibicion de Domiciano, i permission de Probo en
Francia, haze particular memoria
Arnaldo Ferrono,
quejandose,
q̃
que
en su tiempo la cultura ò labor de
las viñas (como segun sentencia de
Columela,
es de tanta ganancia,
que excede à otros qualesquier logros, ò grangerias) avia crecido
tanto, que tenia mucha necessidad
de otro Domiciano que las reformasse. Con el qual contesta en todo
Renato Copino,
lastimandose de
la diminucion en que por esto
aviā
avian
venido las cosechas del trigo, i cebada i otras semillas, i añadiendo,
que para algun reparo de esto, se
acababa de mandar en Francia,
q̃
que
ningun Governador permitiesse en
sus distritos nuevos majuelos, i
q̃
que
de tal suerte se conservassen las vi
ñas antiguas, que por lo menos de
las tres partes de los campos i heredades quedassen las dos para sementeras de pan.