Desuerte, que no se deben estra
ñar los repartimientos i apremios
que aora se hazen, ni que sean tratados en esta parte con alguna aspereza, los que sin ella, no se aplicaràn à cosa de provecho, i trabajo, como casi pintandolos, lo da à
entender Trajano Bocalini en uno
de sus Raguallos del Parnaso,
en
que refiere la quexa que los asnos
dieron à Apolo, cerca de los malos tratamientos, que recebian, i
que èl setenciò, que eran dignos
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de ellos, pues por su natural flogedad, no hazian cosa de otra manera:
I que los que quisiessen hazer j
uizio exacto de las crueldades
q̃
que
viessen obrar contra otros, era necessario, que no mirassen tanto el genio,
ò ingenio del que las usaba, como
la calidad de las costumbres del que
se quexaba de ser maltratado.