Lo
qvinto considero, que
aunque fuera mejor reducir estos
servicios à Indios voluntarios, i
no forçados, i à Españoles, Negros, Mestizos, Mulatos i Zambahigos, como se dize de contrario, i
lo apuntan las cedulas que se han
referido. Lo cierto es, que la experiencia ha mostrado, à los que de
cerca la han hecho, de la condi
cion, i naturaleza de los Indios,
que ferian muy pocos los que se
alquilassen o mingassen de su
volũ
tad
voluntad
, aunque se les diessen crecidos
jornales, porque son floxos en
grā
gran
manera, i amigos del ocio, i de entregarse á sus borracheras, luxurias, i otros vicios, que les ocasionan la Idolatria, i salen, i saldran
siempre de mala gana de sus temples, i naturales, i mas para ocuparse en ministerios tan laboriosos. I
como su codicia es
tā
tan
poca, i se
contentā
contentan
con tan poco para su comer
i vestir, passando muchos la vida à
modo de bestias, donde quiera que
alcançan un poco de Maiz para su
sustento, i sin acordarse de que ay
mañana, ni apetecer riquezas, alhajas, ni devaneos, es necessaria
alguna fuerça, i compulsion, que
les haga salir de este passo. Como
refiriendo sus costumbres, encareciendo su floxedad, i aun añadiendo, que parece que el diablo les
sugiere, i persuade que no sirvan,
ni ayuden à los Españoles, lo dizen
Matienzo, Acosta, Agia, i otros
Autores.