De donde podemos venir en conocimiento de la poca
advertẽcia
advertencia
de Adriano Turnebo,
en afirmar,
que es mentira quanto se dize, i encarece de la fertilidad, i riquezas
del Nuevo Orbe. I la supina ignorancia, ô afectada envidia, i malicia
de Iulio Escaligero,
en escrivir,
que ninguna cosa nace en el, que aya sido, ni pueda ser de provecho
al antiguo, sino antes de daño. Porque en este se crian cavallos, camellos, bueyes, asnos, i mulos, hermosos, buenos, i muchos; i en aquel,
monas, gimios, zarandajas, i cosas
de sueño, i hombres, que distan poco de brutos, siendo los de Europa
autores de la paz, leyes, costumbres, i virtudes, maestros, i ministros de las guerras, dictadores de
las artes, inventores de las
ciẽcias
ciencias
,
i fundadores de la sabiduria, i que
antepone èl la cara de una sola matrona
Flamẽca
Flamenca
, à todas las Elenas
de las Indias.